domingo, 25 de abril de 2010

Un gen humano cura el daltonismo en los monos.

Los primates superan un defecto hereditario que les impedía distinguir el rojo y el verde.

Visión del mono 'Dalton' antes (izq.) y después (drcha.) del tratamiento.

Por primera vez en su vida, dos monos daltónicos han podido apreciar el colorido de un festín de uvas, judías y tomates. Lo han hecho gracias a un gen humano que ha corregido el defecto hereditario que les impedía distinguir el rojo y el verde. Los autores del estudio, que han pasado 10 años adiestrando a los dos primates antes de poder curarlos, dicen que el tratamiento podría solucionar este y otros trastornos de la visión en los humanos.

"Hemos usado ADN humano, así que no tendremos que cambiarlo cuando comencemos a hacer ensayos con personas", explica el investigador de la Universidad de Florida (EEUU) William Hauswirth, uno de los autores del estudio. El trabajo, que publica hoy Nature, supone un espaldarazo para la terapia génica, una técnica experimental que consiste en contrarrestar el efecto de un gen defectuoso con otro sano. Aunque ha demostrado resultados prometedores en los últimos 20 años, aún no se ha materializado en protocolos clínicos comunes debido a complicaciones que han llegado a relacionarse con la muerte de algunos pacientes.

En este caso, los investigagadores usaron un gen humano que permite ver el color rojo y el verde. Antes de inyectarlo a los monos, el equipo pasó 10 años adiestrando a Dalton y Sam, dos monos ardilla macho que, como el resto de sus congéneres masculinos, son incapaces de distinguir los dos colores. Algunas hembras, sin embargo, sí tienen el equipaje genético necesario para ver en color. En humanos, los problemas de ceguera a los colores también son mucho más frecuentes en hombres (7%) que en mujeres (0,4%).

Un test con premio

Los investigadores enseñaron a los primates a usar un test para diagnosticar problemas de visión en humanos. Consiste en una pantalla en la que se ven círculos de color rojo o verde rodeados por otros de un tono diferente. La versión para monos incluía también una especie de abrevadero bajo el monitor. Cuando los animales realizaban bien una tarea, recibían un premio en forma de zumo. Cuando la realizaban mal, tenían que esperar un tiempo de penalización hasta la siguiente prueba.

Una vez adiestrados los monos, Hauswirth y su equipo inyectaron en su retina el gen de la opsina, el pigmento fotosensible que permite a los conos (células especializadas del ojo) de humanos y otros primates ver el color rojo y el verde.

Tras la inyección, los monos se comportaron igual durante cinco semanas, hasta que su percepción cambió de forma brusca. "Fue como si se despertaran y vieran todos los colores por primera vez", explica el oftalmólogo de la Universidad de Washington Jay Neizt, otro de los autores del estudio. "Era incuestionable que veían colores para los que hasta entonces habían sido ciegos", detalla. Explica que, desde entonces, Dalton y Sam llevan ya dos años viendo en colores.

"Aún hay preguntas sin responder sobre la seguridad de esta técnica, pero en estos monos no hubo efectos negativos", comenta el psicólogo de la Universidad de California Gerald Jacobs, que no participó en el estudio.

Los autores mantienen que esta técnica podría usarse en humanos para curar la ceguera a los colores y enfermedades hereditarias más serias. Hauswirth ya está aplicando una terapia similar a la que usó con los monos en un ensayo clínico para tratar la amaurosis congénita de Leber, una rara enfermedad hereditaria de la retina que causa ceguera en niños. Sin embargo, la técnica tiene aún que superar los escollos en los que se han estrellado otros ensayos debido a que, en muchos casos, los genes introducidos causan una fuerte reacción inmune.


6 comentarios:

  1. Hola. Soy Laura del grupo 10. ¡Me he quedado muy sorprendida con esta entrada! Cómo está avanzando la ciencia a pasos tan agigantados que incluso quizás sea probable que en unos años este experimento de frutos en humanos.

    Además el hecho de experimentar con monos, el ser superior más parecido al hombre, me parece una gran idea.
    Aunque por otra parte, es verdad que me cuesta creer que los monos hayan dado señales tan claras de que ahora ven los colores y antes no, ¿cómo demuestran esto? Porque en realidad, quizás los animales ya se habían habituado a hacer la tarea bien simplemente porque recibían una recompensa a cambio. No obstante me parece una noticia muy interesante y ojalá se siga avanzando en la investigación.
    Un saludo

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  2. Hola, soy Rodrigo del grupo 13. La verdad es que bueno ver como hay ayuda entre las diferentes especies. Supongo que esto se estará estudiando a fondo para que pueda hacerse el camino inverso y favorecer a los humanos.
    Un saludo.

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  3. Hola soy Rebeca y estoy haciendo el otro blog de daltonismo.
    La verdad me ha sorprendido mucho vuestra entrada, no me habia imaginado nunca que esta enfermedad se pudiese curar de una forma tan "simple". Es un buen paso para la investigación y tiene que seguir para ver si en todos los casos daría resultados. también es verdad que en monos no se puede saber bien si la eficacia es al 100% y si los humanos querrían someterse a este tipo de ensayos. Esta enfermedad aunque puede condicionar algunas habilidades o trabajos no supone mayor importancia en la salud.

    saludos

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  4. Hola Laura
    Tras adistrar a los monos a hacer pruebas, les inyectan en la retina el gen de la optina, y es a partir de ahi cuando realizan correctamente las prueblas de los circulos rojos y verdes correctamente, con la consiguiente recompensa del zumo.
    Espero haberte ayudado Laura.
    Un saludo
    Miriam

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  5. Muchas gracias por los comentarios, a mi también me sorprendió cuando encontre este artículo, la verdad es que es curioso y parece un gran avance.

    Respecto a la pregunta de Laura, como comprenderas no tengo la respuesta, pero imagino que el comportamiento de los monos cambió tan bruscamente 5 semanas después de la inyección, que ya sabían distinguir elementos que tenían la misma forma pero distinto color...

    Un saludo

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  6. Muchas Gracias Miriam y Jorge por la respuesta. Me imaginaba que quizás no supieráis el porqué pero aun así las respuestas me lo han dejado más claro. Me gusta mucho vuestro blog, es muy original. Un saludo!!!

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